Normalmente, cuando se requiere una nave de cierta forma de procesamiento de acrílico, es típico utilizar un método de corte y un proceso posterior. El material está reelaborado con técnicas de lijado para garantizar un acabado adecuado. La operación es más fácil con un cortador láser. Dado que está cortando y cauterizando al mismo tiempo, el acabado se queda impecable en acrílico y no necesita reprocesamiento.